Torelló es una bodega familiar que tiene su origen en el año 1951, cuando Francesc Torelló i Casanovas decide reorientar la trayectoria agrícola familiar y empezar a elaborar vinos y espumosos embotellados. La familia Torelló posee una fabulosa finca de origen medieval (año 1935) de 135 hectáreas, con olivos y viñedos, donde cultivan desde hace unos años en ecológico variedades autóctonas y foráneas. Elaboran todos sus vinos y espumosos con exigencia y pasión, mostrando todo el carácter y personalidad de la zona donde nacen. En la finca de Can Martí encontramos suelos arcillo-calcáreos y un clima típicamente Mediterráneo, con una temperatura media anual de 16ºC, una pluviometría media de 460 mm/año y precipitaciones de lluvia concentradas en primavera y otoño. Torelló Finca Can Martí Brut Reserva es un espumoso elaborado con Chardonnay , Macabeo, Xarel·lo y Parellada, de viñedos propios situados en la finca de Can Martí. La vendimia es manual, con selección de uva en el viñedo. Una vez en la bodega la uva se despalilla y se prensa. El mosto obtenido fermenta en depósitos de acero inoxidable a temperatura controlada con levaduras autóctonas. Cada variedad se vinifica por separado y una vez realizado el coupage se estabiliza y clarifica naturalmente en depósitos de hormigón. Con este vino se realiza el tiraje para la segunda fermentación en botella donde hará una crianza en rima de un mínimo de 36 meses. pasado este tiempo se realiza el degüelle sin adición de azúcar.

Viticultores y elaboradores de vinos desde hace siglos, han pasado por muchas experiencias. Vendían vinos cuando aún no había marcas y se apreciaba el vino de bota, las mujeres no bebían y el botijo era protagonista.

Con el paso del tiempo, la propiedad de la Familia Torelló se fue haciendo grande en viñas de uva tinta y blanca, aumentó el movimiento comercial y las cosechas imponían su ley en el mercado.

Pero a finales del siglo XIX llegó la plaga de la filoxera, que obligó a arrancar las cepas y replantar. TORELLÓ también superó esta prueba y a mitad del siglo XX llevó a cabo la gran transformación de su Finca Can Martí, introduciendo nuevas técnicas de viticultura, la implantación industrial, las aplicaciones enológicas para el mejor tratamiento del vino y también el inició de la elaboración de sus exquisitos cavas.

Hoy, el resultado son unos vinos y cavas con un toque muy personal, que traen recuerdos de la tierra y que, gracias al control minucioso de todo el proceso, desde la cepa hasta la botella, permite garantizar una alta calidad y seguir potenciando el prestigio de la marca TORELLÓ, presente, en la actualidad, en las mejores mesas españolas y que empieza a valorarse en Europa y Japón.